El Gobierno de Teodoro Picado firmó un acuerdo con la oposición con el propósito de poner fin a la Huelga de Brazos Caídos. En el pliego de garantías electorales se convino, entre otras cosas, aceptar como definitiva la resolución que sobre las elecciones del 8 de febrero de 1948 emitiere el Tribunal Nacional Electoral, y que el control de la fuerza pública fuera entregado -en el lapso de 24 horas- al candidato que ganara los comicios. También se dispuso crear una comisión que investigara las denuncias de violación a las leyes electorales. El pliego, además, fue firmado por los diputados del Partido Republicano (oficial) y los diputados de la oposición. De este modo se puso fin a la Huelga de Brazos Caídos que duró 12 días.